Agrobanco no tolera forma alguna de corrupción o soborno, en ninguna de las actividades que desarrolla.
Agrobanco alienta a que los colaboradores mantengan buenas relaciones con funcionarios, en la medida que no atenten contra ninguno de los principios planteados en el Código de Ética y Conducta.
El Banco rechaza la influencia en el accionar o la toma de decisiones, sobre la voluntad de personas ajenas a estas para lograr beneficio o ventaja usando prácticas no éticas. En ese sentido, los Colaboradores no podrán realizar ni ofrecer, de forma directa o indirecta, ningún pago u ofrecer cualquier otro beneficio, a cualquier persona física o jurídica al servicio de cualquier autoridad, entidad, pública o privada, partido político o candidatos para cargos públicos, con el fin de obtener o mantener, ilícitamente, negocios u otras ventajas.